¿Cerrar plantas nucleares? Un riesgo para la calidad del aire y la salud pública

El cierre de plantas nucleares en EE.UU. podría generar graves impactos en la calidad del aire y la salud pública, según un estudio publicado en Nature Energy. Al analizar diferentes escenarios de transición energética, los investigadores encontraron que eliminar la energía nuclear llevaría a una mayor dependencia del carbón, gas y petróleo, aumentando las emisiones de CO₂, NOx y SO₂. Como resultado, se estima que este cambio provocaría 5,200 muertes adicionales por contaminación del aire cada año y entre 78,000 y 170,000 muertes adicionales a lo largo del siglo XXI debido a los efectos climáticos de las emisiones de CO₂.

El estudio destaca que, si bien la energía nuclear enfrenta desafíos económicos y de percepción pública, su retiro sin una estrategia adecuada podría empeorar las desigualdades ambientales, ya que las comunidades afroamericanas son las más expuestas a la contaminación resultante. Se exploraron escenarios en los que el cierre nuclear se acompaña de una mayor penetración de renovables, pero incluso en estos casos persisten impactos en la calidad del aire.

Estos hallazgos subrayan la importancia de planificar cuidadosamente la transición energética. Sustituir la energía nuclear con fuentes renovables sin depender de combustibles fósiles es clave para mitigar impactos en salud y clima. La política energética debe equilibrar seguridad, viabilidad económica y sostenibilidad para evitar consecuencias negativas en la población.

Descarga el artículo completo acá: